¿Una buena novela puede ser un gran afrodisiaco? ¡Claro que sí! Y es que por medio de la lectura nuestras fantasías, sensaciones y pensamientos pueden elevarse al máximo llevándote a conocer nuevos mundos desde la comodidad de tu sillón o donde sea que la disfrutes. ¿Apoco no?
En esta recopilación hecha por nuestro equipo, encontrarás títulos que estimularán tus sentidos para que la imaginación sea tu cómplice ideal, además podrás conocer temas sobre salud sexual que te ayudarán a conocer mejor tu cuerpo.
1. Conversaciones sexuales con mi abuela, de Ana Sierra (Kailas)
Nada como una charla entre abuela y nieta para desentrañar los secretos, mitos y tabúes de la sexualidad. Así sucede en este libro en el que dos generaciones de mujeres, con todas sus diferencias y similitudes, se encuentran en un diálogo sin rodeos sobre feminismo, los orgasmos, la masturbación y hasta los fetiches y fantasías más privados.
La sexóloga Ana Sierra y su abuela (quien se roba el protagonismo de este libro) intercambian puntos de vista, experiencias y una ligereza incomparable para hablar de la regla, el tamaño y forma de los penes y muchos otros temas en una conversación íntima a la que todxs estamos invitados. Después de todo, y como dicen ellas, la sexualidad existe y está en todos lados aunque la disimulemos.
2. El algoritmo del amor, de Judith Duportail (Contra)
Después de cortar con su novio de muchos años, Judith Duportail hizo lo que muchxs haríamos: descargar Tinder y comenzar a hacer swipe en busca de un nuevo amor. Y aunque no tardó en hacer match con algunos prospectos, lo que más le interesó a esta periodista francesa no fue el catálogo de caras que ofrece la app sino las preguntas que casi nadie hace: ¿cómo funciona un algoritmo que relaciona de manera sexoafectiva a la gente?, ¿quién gana dinero especulando con el deseo?, y sobre todo, ¿cuál es su propio nivel de “deseabilidad”?
Sin perder el sentido del humor, Duportail va tras los misterios de Tinder y, de paso, los del amor en tiempos del algoritmo. Sin dar spoilers de este entretenido libro, sólo podemos decir que si alguna vez has tenido una mala experiencia con las apps de citas, lo más probable es que no sea casualidad...
3. Vita sexualis, de Ōgai Mori (Trotta)
En el Japón de la Era Meiji había toda suerte de estímulos que no le piden nada a la sobreabundancia actual de contenidos eróticos: grabados en madera con escenas pornográficas (favoritas de los adolescentes); el mundo de las casas de té donde se daban cita las geishas con sus clientes; y revistas con relatos como Vita sexualis, una novela sobre el descubrimiento de los placeres y riesgos del sexo.
Su protagonista, el joven Shizuka Kanai (alter ego de Ōgai Mori), narra la evolución de su líbido desde que es un niño hasta convertirse en un adulto que trata de domar al “tigre” del apetito sexual. Esta novela es la ideal para los amantes del erotismo oriental, lleno de matices y rituales que nos fascinan y seducen por su elegancia y misterio.
4. Diarios amorosos, de Anaïs Nin (Siruela)
“Mi amor, ahora sé amarte mejor porque no puedes hacerme daño”. Así escribe Anaïs Nin en uno de los arranques de pasión desbocada que ocurren de tanto en tanto en estas páginas llenas de besos, amores prohibidos, affaires y una sensibilidad que desteje con sutileza sus experiencias como mujer y escritora.
El talento de Nin es tan grande que señores “llenos de literatura y faltos de comprensión” como Henry Miller, Antonin Artaud o Gore Vidal (por mencionar sólo a algunos de sus acompañantes de aventura) parecen aquí caballeros dignos de un cariño que conjura con sensualidad e inteligencia su propio erotismo. Escritos durante los años treinta del siglo pasado, estos diarios amorosos siguen ardiendo al rojo vivo.
5. Carta de amor de Emily Dickinson a Susan Gilbert, de Emily Dickinson (Epistolar)
¿Cuánto dura el amor? Tal vez poco o una eternidad. En el caso de una carta puede que basten sólo unos párrafos y unos minutos de lectura en voz alta. Como en esta carta de la poeta Emily Dickinson a la también escritora Susan Gilbert, quien fue su amante secreta durante décadas, además de su amiga y ¡cuñada! (Susan se casó con el hermano de Emily, lo cual no evitó su romance)
En esta epístola, Dickinson nos traslada a su legendaria habitación (esa de la que casi nunca salía y en la que escribió innumerables poemas) y con palabras sutiles evoca un anhelo cálido como el lecho de una cama. He aquí un recordatorio de que bastan unas pocas palabras para estimular nuestro cuerpo, intelecto y sentimientos.
¿Qué te parecen estos títulos? ¿Te gustaría leerlos completos? ¡No te pierdas nuestra estantería “Platanomelón” en Bookmate, donde encontrarás estos y muchos libros más sobre erotismo y sexualidad!
Además, te tenemos una sorpresa: Con todas tus compras mayores a $500 MXN en Platanomelón, te estaremos obsequiando un código para un mes gratis en Bookmate, el cual recibirás en tu correo electrónico para que puedas disfrutar de los libros que tú quieras. ¡Lo único que necesitas son muchas ganas de leer y de jugar!